Escrito por Albert Einstein
en Diciembre de 1916, el siguiente prólogo de la susodicha obra da cuenta de la vocación didáctica del autor, e insinua todo un concepto sobre el rol social del conocimiento y la potencia inclusiva de la divulgación científica.
Hoy en dia la divulgación florece, producto de un denodado esfuerzo proveniente de ciertos sectores políticos que consideran prioritaria la inclusión social en todos sus aspectos. Pero este florecimiento no es desbocado; para sostenerse se enfrenta dia a dia a las prácticas y hábitos conservadores del estatus académico del pensamiento, como algo radicalmente separado de las masas.
Hoy en dia la divulgación florece, producto de un denodado esfuerzo proveniente de ciertos sectores políticos que consideran prioritaria la inclusión social en todos sus aspectos. Pero este florecimiento no es desbocado; para sostenerse se enfrenta dia a dia a las prácticas y hábitos conservadores del estatus académico del pensamiento, como algo radicalmente separado de las masas.
Prólogo
El presente librito pretende dar una idea lo más exacta posible de la teoría de la relatividad, pensando en aquellos que, sin dominar el aparato matemático de la física teórica, tienen interés en la teoría desde el punto de vista científico o filosófico general. La lectura exige una formación de bachillerato aproximadamente y -pese a la brevedad del librito- no poca paciencia y voluntad por parte del lector. El autor ha puesto todo su empeño en resaltar con la máxima claridad y sencillez las ideas principales, respetando por lo general el orden y el contexto en que realmente surgieron. En aras de la claridad me pareció inevitable repetirme a menudo, sin reparar lo más mínimo en la elegancia expositiva; me atuve obstinadamente al precepto del genial teórico L. Boltzmann, de dejar la elegancia para los sastres y zapateros. Las dificultades que radican en la teoría propiamente dicha creo no habérselas ocultado al lector, mientras que las bases físicas empíricas de la teoría las he tratado deliberadamente con cierta negligencia, para que al lector alejado de la física no le ocurra lo que al caminante, a quien los árboles no le dejan ver el bosque. Espero que el librito depare a más de uno algunas horas de alegre entretenimiento.
Frases destacadas de Albert Einstein:
"Es casi milagroso que los métodos modernos de instrucción no hayan conseguido ahogar por completo la santa curiosidad de la investigación, pues la principal necesidad de tan delicada planta, aparte del estímulo inicial, es la libertad. Sin esta, corre seguro peligro de muerte y creo que incluso puede despojarse de su voracidad a un animal de presa sano si se le obliga a comer a golpes de látigo con hambre o sin ella...""Estoy convencido de que hay solamente un camino para eliminar estos graves males, el establecimiento de una economía socialista, acompañado por un sistema educativo orientado hacia metas sociales."
"La principal fuente de los conflictos actuales entre las esferas de la religión y de la ciencia yace en el concepto de un Dios personal".
"Considero que el peor defecto de la educación es el sistema escolar que opera fundamentalmente a base del temor, la coacción y la autoridad artificial de los maestros".
"Creo en el Dios de Spinoza, que nos revela una armonía de todos los seres vivos. No creo en un Dios que se ocupe del destino y las acciones de los seres humanos ".
"Cuando las leyes de la matemáticas se refieren a la realidad, no son ciertas; cuando son ciertas, no se refieren a la realidad".
"..el maestro ha de gozar del menor poder coactivo posible, lo cual significa que el respeto del estudiante ha de resultar de una valoración de las cualidades humanas e intelectuales del maestro."
"El problema del hombre no está en la bomba atómica, sino en su corazón".
"En los momentos de crisis, sólo la imaginación es más importante que el conocimiento".
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